Para viajes largos lo mejor es moverse ligero de equipaje pero esta vez me han obligao a pasarme de ligero. Tres "trapos" y poco más llevaba en mi sospechosa mochililla y me los retuvieron para examinarlos. Efectivos no se so serán, lo que no son es rápidos. Casi una sema y sigo sólo con una muda, unas chanclas y un cepillo de dientes dentro de una bolsa, además de lo puesto. Israel tiene más que razones para extremar la seguridad y no se lo critico. Ya me conformo con que me devuelvan mis cosas al abandonar el país.
Tras el paso por Tel Aviv me he venido a Jerusalén en mi "cruzada" personal...
La primera visión que tuve sobre la ciudad vieja.
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La papelera local
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A no, que se trata del muro de las Lamentaciones
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Vestido para la ocasión.
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La cúpula de la Roca brilla como un faro.
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Ausencia de vehículos y de perros en las empedradas, estrechas y sinuosas calles de intramuros.
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Saludos ;-)